Esposo Adicto a la Pornografía

Mi esposo es un adicto a la pornografía - el estado actual de la unión
Su esposo es un adicto a la pornografía. Usted está hecha pedazos por su comportamiento, y con razón. ¿Qué hace ahora? ¿Sigue con él? ¿Lo castiga? ¿Lo bota? Todo lo que sabe es que no puede competir y no competirá con el tipo de cosas con las que él se está llenando la mente.

Mandy dijo que siempre le creyó a su esposo cuando él le decía que simplemente no tenía mucho deseo sexual - hasta el día en que ella abrió un paquete que vino en el correo. Dentro habían dos DVD de mujeres desnudas, un ejemplar de trajes de baño de Sports Illustrated, un catálogo de Frederick de Hollywood, un catálogo de Victoria Secret, y un video de Howard Stern.

Quedó destrozada, diciendo: "La mayoría de los hombres quieren tener sexo todo el tiempo. El mío ahora dice que odia completamente al sexo, pero que le gusta mirar a mujeres desnudas y fantasear, que se ha estado masturbando dos o tres veces al día ¡y que no le queda nada para mí! Me siento completamente rechazada por mi propio esposo. ¿Entiende eso? ¿Entiende que amo a mi esposo y que quiero que él me ame? No tengo a nadie con quien conversar de esto. Sé que debería desahogarme con el Señor, pero me duele demasiado. ¿Existe alguna ayuda para mí?"¹

Mi esposo es adicto a la pornografía - ¿Es normal sentirme como me siento?
Si su esposo es adicto a la pornografía, no está llevando una vida disciplinada. Está robándola, así que naturalmente usted se siente destrozada. ¿Qué otros sentimientos surgirán en usted después de conocer acerca de su adicción a la pornografía y de la consiguiente masturbación? Rabia, ciertamente. Es normal sentir rabia cuando una ha sido robada, y también es normal sentir rabia hacia el pecado sexual de su esposo. No necesita disculparse por eso.

No se sorprenda si también se siente como una completa tonta. ¿Qué podría ser más normal? Cuando usted descubre que su esposo ha estado mirando secretamente el cuerpo desnudo de otra y masturbándose, esto la tomará totalmente por sorpresa. Hasta querrá darse cabezazos por no haberlo visto venir, especialmente si su intuición femenina le mandó señales de advertencia desde el principio. . . señales que usted, en su lealtad hacia él, desestimó como paranoicas o hasta completamente ridículas.

Si usted ha ignorado esas señales, se sentirá como una tonta, otra emoción común que a continuación inunda a las esposas. Pero ese sentimiento se convierte en una inundación abrumadora si usted se ha estado culpando a sí misma por su falta de deseo sexual en los pasados años, imaginándose que si su "comida" hubiera sido buena lo hubiera mantenido regresando por más.

Debido a la culpa, usted a lo mejor cargó con toda la responsabilidad de la falta de deseo de él -- tal vez haciendo terribles dietas para perder peso, y sudando a mares con ejercicios extenuantes, para despertar el deseo de su amado. Tal vez usted visitó una tienda de Victoria Secret para envolverse en algo visualmente tentador con el fin de llamar su atención, aunque el ponérselo la hizo sentir incómoda. Y a menudo, cuando usted inició valientemente ese encuentro apasionado, su vulnerabilidad le fue arrojada en la cara.

¿Y ahora? Usted descubre que nunca fue culpa suya. Mientras usted sacrificaba hamburguesas jugosas por ensaladas desabridas y corría en la máquina de trotar como un ratón en la rueda, el estaba masturbando su deseo sexual con otras. En sus días más sombríos, ahora usted hasta sospecha que él, convenientemente, la llevó a creer que usted tenía la culpa, intencionalmente y artificiosamente utilizando su culpa, miedo, y regímenes disciplinados, para encubrir las huellas de su vida indisciplinada. ¡Qué estúpida se siente! ¡Qué embaucada!²

Mi esposo es un adicto a la pornografía - ¿Qué hago ahora?
Enfréntelo. Debido a su pecado sexual, su matrimonio está en peligro. Ciertamente usted está herida y tiene mucha rabia. Ha perdido esa imagen tibia, acogedora de su matrimonio, y eso naturalmente la hiere profundamente. Pero en otro sentido, no ha perdido tanto como piensa, porque su matrimonio no era lo que aparentaba ser. ¿Mi punto? Existe un resquicio brillante de esperanza detrás de esta nube oscura. Piénselo: Usted ha estado viviendo en un mundo falso, y si no hubiera sido por esta revelación del pecado de su esposo, usted hubiera seguido toda su vida ciega y trágicamente sin experimentar las riquezas que Dios desea para su matrimonio. Pero Dios es fiel, y Él la quiere demasiado para dejarla donde está ahora. Por supuesto, adivino que usted no ha sentido mucho esto como amor, y tal vez ha estado tan enojada con Dios como lo ha estado con su esposo. Pero esa rabia está mal dirigida. Aunque el descubrimiento duele, el Señor le ha demostrado Su amor eterno por usted al descubrir el pecado sexual de su esposo, y está listo para ayudarla a pasar por esto.

Aunque usted no se sienta bien con todo lo que ha sucedido, este evento podría conllevar a uno de los tiempos más esperanzadores de su vida. El descubrimiento del pecado secreto de su esposo ha descubierto el verdadero estado de su unión matrimonial, y ahora usted tiene la oportunidad de experimentar algo real con él. El matrimonio no tiene que ser una gran mentira. . . Lo que sea que haya pasado hasta ahora, no tiene que quedarse ahí.

Sería beneficioso si usted viera el descubrimiento del pecado de su esposo como la gracia de Dios en su vida. Su indecencia sexual ha sido como un enorme tumor que le extraía la vida, atacando silenciosamente a su matrimonio. Pero ahora que usted ha encontrado el cáncer, hay esperanza. Ahora usted puede orar por la sanación, comenzar un tratamiento, y buscar una vida matrimonial restaurada y desbordante de salud. Lo mejor de todo es que esta es su oportunidad de experimentar la verdad de que todas las cosas les ayudan a bien a aquellos que aman a Dios.

Dios la ha hecho libre para buscar la sanación personal. Él añora ver lo mismo en su matrimonio. Esta es su oportunidad para vivir como una cristiana de verdad, para sacrificar de verdad, y para alinear verdaderamente su pensamiento con Cristo en relación a su matrimonio.³

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Usted ahora tiene que decidir. ¿En qué se va a enfocar? - ¿en el dolor? ¿o en la esperanza? Al principio, probablemente en los dos, y no la culpo. Habrá días en que el dolor de la traición de su esposo la abrumará, y su rabia ahuyentará muy lejos a la esperanza. Está bien. Dios entiende, y no le dará un golpe en la cabeza por su falta de fe. Él preferiría abrazarla y acercarla a Él, si usted lo deja. Usted es su hija, ¿recuerda?

Aún así, agradecer a Dios por la revelación y escoger la esperanza para el futuro son los primeros pasos para su libertad. Sí, aún si su esposo todavía no se ha arrepentido completamente. Seguramente sus primeros pasos vacilantes en esta dirección serán como el cruzar un río saltando sobre piedras resbalosas, lo que significa que no será fácil. Estar agradecida en medio del caos es siempre un reto. A veces se siente como si usted le está agradeciendo a Dios por su dolor, lo que podría parecer cómico y hasta hipócrita a sus ojos. Puede requerir disciplina diaria, hasta disciplina de minuto a minuto, para mantener un enfoque de agradecimiento.

Pero a medida que discipline su corazón hacia la verdad y escoja estar agradecida por lo que Él ha hecho al abrirle los ojos, su obediencia comenzará a levantar una brisa de aliento del Espíritu en su vida que comenzará a disipar su dolor. Eso es lo que buscamos.

No es que "gracias, Señor" sea algún tipo de frase mágica que hará que todo se mejore instantáneamente. Hasta que su esposo se comprometa de corazón a ganar la batalla, hasta que Dios tenga toda la atención de su esposo, las cosas todavía serán duras para usted.

Pero hasta en ese caso, un corazón agradecido es el mejor primer paso, un paso que comenzará a devolverle su sanidad mientras espera que Dios haga Su trabajo en la vida de su esposo. Todo salió a la luz ahora. Usted ya no está adivinando lo que pasa, y conoce la situación de su matrimonio. Seguramente tendrá que esperar un tiempo por la victoria, pero aún así, todo no está perdido. Este tiempo le puede servir, ya que tiene todavía mucho trabajo por hacer en su propia vida, si espera responder al llamado de Dios como la compañera de su esposo, un trabajo que servirá para enfocar la atención de su esposo en Dios.⁴

Recuerde, en última instancia, esto es entre su esposo y el Rey. No necesita saltar cada vez que él falle. Confíe en Dios. Cuando usted no está hablando, puede estar segura que Dios lo está haciendo.⁵